Crecí
Crecí
Crecí
Crecí
Crecí
Crecí
Crecí
Crecí
Crecí
Que loco todo. Cómo odio no estar en pizo firme. Cómo odio la inestabilidad de las cosas. Y lo peor es que así me siento ahora. Yo solo sé que no sé nada. Estoy en mi auge de total y completo desconocimiento sobre mis sentimientos.
A la vez me siento muy muy bien, me hacen sentir bien. Me pongo contenta cuando recibo mensajes porque importo algo. Me pongo ansiosa cuando titila la ventanita naranja de mi computadora, y por mínima cosa que sea, se me hes grata leerla. Me brota una sonrisa cuando atiendo esa llamadita que me desiquilibra tanto las cosas. Y me gusta gastar y perder el tiempo con vos. NOSE, otra vez. Pero, ¿Quién más lo va a poder explicar? Tampoco sé si te diste cuenta, que me estoy dejando llevar. Estoy dejando de un lado, esas que me están perturbando. No me está importando lo que hice/me hicieron/hice dejar hacerme para empezar de nuevo. No me está importando tus fantasmas porque yo también tuve los míos. Y estoy dejando absolutamente atrás la idea de que me vengas a serenatear. Creo que en parte, es un logro... Qué no esté pensando tanto en las cosas es un cambio. Ya no me interesa las palabras que te vaya a decir mañana porque si te caen bien adelante y si no, terminamos esta caricatura en paz, atrás.
Igual, medio que sigo en la mitad del océano. Probé si el agua no estaba muy fría. Me metí. Calenté un poco antes de ejercitar, y me mandé. Nadé hasta mitad del Atlántico y ahora nose a donde llegaré, si a la península Ibérica o me mando devuelta para la Costa Atlántica. Me gusta viajar, así que espero no perder. Ya estoy mandada.
