scary living

Creo que perdí algo y fue una aguja, y me muero si fue en un pajar. Cuando más necesito deshacer una burbuja que yo misma la creé y en la cuál me encerré, se me viene a desaparecer la aguja o mejor dicho mi valor para romper mi propia cárcel, mi propia celda en la que yo (otra vez) me privo la libertad de abrirme y confiar en los demás. ESO ES MIEDO! Buh.
Creo que estás empezando a importarme bastante. Me gusta recibir tus señales y no es de tonta, pero no entiendo algunas cosas. Me estás queriendo decir algo que me quedo pensando para no seguir soñando pero al final otra no me queda y nose si comprenderlo pueda. No quiero serenatas, no quiero palabras ganadas, no quiero chamuyo barato que es fácil de encontrarlo y más dármelo. Me hace mal. Me da mucho de que pensar. No soy lenta, no soy ingenua. Sí desconfiada. Date cuenta, armé este campo de concentración en el que solo quepo yo. En el que me da miedo el exterior, y no le doy lugar a lo que se atrevería un corazón. Me hago tan la guapa creyendome que sé de las cosas y aconsejando en vano, cuándo conmigo misma no puedo hacer ni un cuarto de las cosas. Definitivamente, conmigo misma soy la peor amiga. Entendeme, la muy poca experiencia y la nula sabiduría que tengo son muy putas, me hacen quedar como una mula cargada de penares.
Soñemos que todo marcha bien, que no hay complicaciones ni anteriores. ¿Para qué viento que sople me queres llevar? Estoy a la deriva.